Plataformas online de criptomonedas: primeros pasos a lomos de un gigante

Están en pleno auge, son fuente de oportunidades y disponen de una mecánica intuitiva que simplifica al máximo las operaciones. Las plataformas de criptomonedas representan el espacio online más eficaz que existe para quienes están interesados en la compraventa y el intercambio de monedas digitales. Todo ello, a través de dos vías posibles: empleando criptomonedas o usando dinero fiduciario, es decir, el que está respaldado por el banco central de cada país, como por ejemplo el euro o el dólar.

Estos entornos, también llamados exchanges, están diseñados para funcionar como un acceso inmediato al mercado de este tipo de activos. Además, la gran popularidad que han conseguido alcanzar en la última década ha provocado la mejora en la calidad de sus servicios y en la seguridad (sistemas criptográficos y de cifrado) que ofrecen a los usuarios. En esencia, la dinámica no encierra muchas dificultades, y es que uno puede realizar las transacciones que desee por medio de un sencillo monedero virtual.

A grandes rasgos, encontramos dos formas de desenvolverse en un exchange. Por un lado, tenemos el método tradicional, que plantea un escenario en el que participa un intermediario que ejecuta las acciones y en el que el valor de las monedas se fija en función de lo que vaya dictando el mercado. Por otro, disponemos de la modalidad peer-to-peer, que no está tan centralizada y que prescinde de la figura de un tercero a la hora de operar, consiguiendo así una relación más directa. En este último caso, el precio lo marca el vendedor.

Llegados a este punto, la pregunta se nos antoja elemental: ¿a qué plataformas de criptomonedas conviene arrimarse cuando se es un principiante? Partiendo de que Internet está repleto de ellas, resulta difícil elaborar un ranking justo. Ahora bien, si nos atenemos a los aspectos fundamentales a los que todo exchange competitivo debe hacer frente, destacamos principalmente tres nombres: Coinbase, Binance y Kraken. Todos ellos tratan de dar la mejor respuesta a variables como la rapidez de las transferencias, la seguridad y la variedad de monedas disponible.

Coinbase puede presumir de tener registrados a más de cuarenta millones de usuarios y de acumular un montante de negocio que ronda los quinientos billones de dólares. Se trata de un exchange versátil que, además de facilitar la compraventa de criptomonedas, permite al interesado realizar pagos en comercios que acepten este tipo de divisas.

Dentro de sus atractivos más notables está su capacidad para asegurar la custodia de los fondos monetarios, y es que casi el 100% de los mismos está alojado offline, es decir, al margen de servidores. Esta característica evita que se produzcan robos informáticos, ya que el dinero está repartido por todo el mundo de manera física.

Por su parte, Binance ofrece la posibilidad de operar con más de cien criptomonedas y un servicio de atención al cliente que permanece activo en todo momento. Sus comisiones permiten un mayor margen de maniobra, puesto que lo máximo que cobran bajo este concepto no supera el 0,04%. De igual modo, la velocidad de su procesamiento arroja cifras sobresalientes: hasta un millón de operaciones por segundo.

Con Kraken ponemos el broche final a este repaso. Estamos frente a una de las plataformas de criptomonedas más seguras del momento. No sólo salvaguarda los fondos bajo la opción offline, sino que además encripta toda la información sensible bajo la tecnología más avanzada e integra un equipo de profesionales centrado en buscar constantemente la vulnerabilidad del sistema. Kraken propone un espacio en el que hacer trading está ligado al bajo coste y pensado para los recién llegados, ya que incorpora multitud de recursos de carácter didáctico.

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