Israel Ferrer, un autónomo de Alicante, había presentado hasta quince reclamaciones y demandas contra las entidades bancarias de Banco Popular, CAM y BBVA por el cobro de comisiones irregulares. Tras varios años de litigio ha logrado recuperar 38.000 euros por los servicios cobrados y no prestados al cliente.
Este ejemplo es uno más de los que nos indican que el dinero que nos cobran por las comisiones irregulares se puede recuperar. Sin ir más lejos son las propias entidades las que han legitimado la postura de Israel Ferrer, e incluso le invitaron a abrir cuenta corriente a sus amigos y familiares en sus respectivas sucursales.
Los bancos no tenían ni una sola sentencia en contra que les obligase al pago de la cantidad reclamada, sin embargo antes del juicio todas las partes han llegado a un acuerdo. Las comisiones o gastos recurrentes suelen desembocar en grandes cantidades de dinero a final de año.
Estos cobros se realizan de forma automática tanto a empresas como autónomos que tengan contratos de leasing, préstamos personales, hipotecas o tarjetas de crédito o gasolina. Lo cierto es que, como le ha ocurrido a este trabajador alicantino, las comisiones bancarias se pueden recuperar.
Eso sí, tal y como cuenta el propio Ferrer, se ha pasado los últimos dos años de sus ratos libres estudiando recibos y recopilando información bancaria, visitando banco sin comisiones para obtener nuevas perspectivas y solicitando toda la documentación que cada banco tiene la obligación de facilitar a sus clientes.
El problema con el que se ha encontrado durante todo este tiempo ha sido la lentitud de los procesos. Los plazos para resolver cada reclamación suelen ser de dos meses, de dos a ocho meses para contar con un posicionamiento del Banco de España y cerca de un año hasta obtener la sentencia judicial.
Al menos la espera ha merecido la pena.
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